Artículos en El Decano

27 octubre 2008

REPORTAJE

Teresa Cabarrús, un falso mito de Guadalajara

Fernando Díaz-Plaja sostiene en un libro publicado en 1957 que Teresa Cabarrús, la única española influyente en la Revolución Francesa, nació en Guadalajara. La escritora Carmen Posadas lo desmiente en su última novela. El padre de Teresa Cabarrús impulsó la comunidad de regantes de Uceda y fue el creador del Banco de España
Teresa Cabarrús, española de nacimiento, fue “reina” durante la República de la Revolución Francesa. Su belleza encandiló a uno de los jefes de la Revolución: Juan Lamberto Tallien. Ejerció una influencia enorme y, según la leyenda, fue la encargada de acabar con el terror de esta época. ¿Cómo? Cuando estaba a punto de ser guillotinada, le pidió a Tallien que hiciera algo, o bien se le acababa disfrutar con sus encantos. Lo que hizo fue ejecutar a Robespierre. Según un libro de Fernando Díaz-Plaja aparecido en 1957, Teresa Cabarrús nació en Guadalajara. Sin embargo, la escritora Carmen Posadas acaba de publicar una novela en Espasa, titulada “La cinta roja”, donde sostiene que nació en Madrid, concretamente, en el barrio de Carabanchel. No deja de estar en el aire, por tanto, si una de las heroínas de la Revolución más importante de la historia forma parte de la mitología de nuestra tierra.
El Decano de Guadalajara, 26.09.08
Raúl Conde

Cuentan algunos historiadores que la mayoría de mujeres que han pasado a la posteridad no lo hicieron, precisamente, por sus virtudes. Al revés: la mayoría son paradigmas de lo enigmático, mezclado con un aire avieso o tal vez inquietante. Teresa Cabarrús ha pasado a la historia por ser una de las “reinas del directorio”, según la definición del investigador alcarreño José Luis García de Paz. Fue una de las pocas mujeres españolas, quizá la única, que participó en la Revolución Francesa. Durante esta época ejerció una notable influencia debido a su relación con uno de los líderes, Juan Laberto Tallien. De hecho, la Cabarrús fue conocida como Madame Tallien y “Notre-Dame de Thermidor”, Nuestra Señora de Thermidor. Según la leyenda, fue ella quien acabó con el terror durante la revolución de 1789. Cuando estaba a punto de ser guillotinada, se dirigió a Tallien y le imploró que hiciera algo. A cambio, él podría seguir gozando de los favores sexuales y los encantos hermosos de Teresa Cabarrús. Será porque el destino lo tenía preparado así, o tal vez porque los hombres al final siempre acabamos sucumbiendo ante el poder femenino, el caso es que Tallien reaccionó acabando con la vida de Robespierre, uno de los artífices del terror durante la Revolución. Por eso la Cabarrús pasa por ser quien finiquitó una de las etapas más sangrientas de un periodo convulso y vibrante.

Origen discutido

El caso es que la figura de Teresa Cabarrús ha vuelto a recobrar protagonismo recientemente. La escritora Carmen Posadas (Montevideo, 1953) acaba de publicar su última novela, que lleva por título “La cinta roja” (Espasa), donde abunda en la trayectoria vital de una de las heroínas de la Francia revolucionaria. La novelista uruguaya sostiene que Cabarrús nació en Madrid, concretamente en Carabanchel. Algunos historiadores afirman que el lugar de nacimiento fue el castillo de Carabanchel Alto, es decir, lo que hoy sería la cárcel. Sin embargo, el prestigioso escritor Fernando Díaz-Plaja publicó en 1957 un extenso volumen donde afirma que Cabarrús donde nació fue en Guadalajara. El libro se titula Teresa Cabarrús. Una española en la Revolución Francesa. Fue editado por Ediciones Marte en 1957, aunque salió una segunda edición once años después. Lo que sí está claro y documentado es que vio la luz el 31 de julio de 1773.

Díaz-Plaja, que escribió multitud de libros y reportajes de historia contemporánea, escribe: “Teresa Cabarrús, nacida en Guadalajara, hija de un banquero, que llegó a convertirse en una figura famosa en la época revolucionaria. Madame Tallien, como era llamada, por sus amores con Jullien Tallien, famoso por haber dirigido la conjura que acabó con Robespierre, el “Incorruptible”. En realidad, Fernando Díaz-Plaja no da más datos ni concreta dónde nació exactamente nuestra protagonista. Es decir, no especifica el pueblo, por lo que cabe pensar que, de ser así, su alumbramiento se produjo en Guadalajara capital.

Teresa Cabarrús era hija de Francisco Cabarrús, uno de los fundadores del Banco de España (entonces Banco de San Carlos) y ministro de Finanzas de José Bonaparte. Según el doctor Joaquín Aroca, instaló una fábrica de jabón en Carabanchel. También impulsó el conocido como Canal de Cabarrús, en Torremocha del Jarama (Madrid), que permitió la creación de un Reglamento de regantes para los vecinos de Torrelaguna, Torremocha, Patones y Uceda, ya en Guadalajara. Cuando su familia consigue prosperar deciden mandar a Teresa y a sus dos hermanos a París, donde reciban una educación acorde con su nuevo estatus. Teresa fue educada en un convento, al estilo de las jóvenes de la época. Luego se casa muy joven, a los 14 años, en 1787. Su marido, Jacobe Devin de Fontenay, era miembro de una familia aristócrata y rica. Ambos se codeaban con lo más granado de la sociedad. García de Paz asegura que en sus salones se conocieron Napoleón y Josefina, lo cual ya es suficientemente explícito del poder y el magnetismo de la dama española. Pese a ello, parece ser que durante el Imperio fue excluida de los salones imperiales porque Napoleón consideraba escandalosa su conducta

Los continuos devaneos e infidelidades de la Cabarrús llevaron a su marido a pedirle el divorcio, en el año 1792. París se convierte en una ciudad peligrosa. Decide irse y parte hacia Burdeos, según la mayoría de historiadores, con intención de regresar a España. Justo en este viaje conoce a Jean-Lambert Tallien, político enviado a Burdeos para convencer a esta ciudad de que debían abandonar la influencia de los girondinos. París ya había caído. A Tallien, según la documentación existente, se le describe como un hombre guapo, con el pelo rubio, rizado, y destaca por ser una persona fogosa y elocuente. No sólo tenía en su favor su cara bonita. También su posición: entonces era el líder indiscutido de la ciudad. La atracción entre Teresa y él fue mutua. Carmen Posadas opina que “supo usar su belleza, su capacidad de intriga y seducción para sobrevivir en tiempos muy difíciles. Por eso, es admirable, aunque diríamos que políticamente incorrecta”.

Colección de amantes

Su relación con la Cabarrús elevó a Tallien en la sociedad de la época, ya que era una mujer muy bella, elegante y de alta posición social. También le acarreó envidias de sus correligionarios, que le vieron como un traidor de los ideales de la revolución. A esto se sumó que Teresa se dedicó a ayudar y proteger a realistas y girondinos de Burdeos. Se dice que estas ayudas otorgadas le reportaron importantes regalos, por lo que se la llamaba “Notre-Dame du Bon Secours”. Finalmente, Teresa fue encarcelada en París. Tallien debe defenderla en la Convención. Éste, junto con varios conspiradores, consigue acabar con Robespierre, y gracias a esta participación Teresa Cabarrús queda en libertad. Ambos se casaron por lo civil en diciembre de 1794. Ya entonces, Teresa también ha triunfado en París. Pasa a ostentar un título más positivo que el anterior, ahora se la llama “Notre-Dame de Termidor”. Tallien adoraba a su mujer, pero con el paso del tiempo deja de ser correspondido. Pierde poder político, quedándose relegado del Directorio, y esto hace que su mujer busque otro partido algo más interesante. Lo encuentra en Barras, uno de los miembros del Directorio. Junto a él continúa con su ritmo habitual de recepciones y fiestas. No fue su último amante. Tuvo alguno más. Al final, murió en el castillo de Chimay, en Bélgica, en 1835.

El libro de Díaz-Plaja sobre Cabarrús es un compendio muy completo sobre sus peripecias vitales, que son muchas y extraordinarias. El libro de Carmen Posadas es una novela, aunque su autora afirma que ha sido muy fiel a los hechos reales. No sé sabe, a ciencia cierta, si la mujer española más poderosa durante la Revolución Francesa nació en Guadalajara o en Madrid. en lo que sí coinciden todos es que la turbulenta historia de amor que vivió con el revolucionario Tallien fue el momento culminante de una vida para subrayar: aristócrata, rea de la guillotina, amante de asesinos y de futuros emperadores, llegó a ser revolucionaria, princesa y madre de diez hijos.