Periodismo

18 abril 2006

EVA DOMÍNGUEZ

‘Tagging’: herramienta para un periodismo transparente

Tag’ significa etiqueta en inglés, algo que sirve para catalogar, marcar. El ‘tagging’ online consiste en marcar aquellas páginas o contenidos de interés con palabras clave. El vocablo se ha hecho especialmente popular a raíz del éxito de proyectos basados en este sistema, como Delicious, un marcador de favoritos compartido.
La Vanguardia, 15.04.06
Eva Domínguez

En Internet se vive una revolución al día. Cada una de ellas con una palabra anglosajona que incorporar y descifrar. No da el cuerpo para tanto cambio y menos el periodístico, tan acostumbrado a sus rutinas, basadas en una tradición de valores centenaria. Pero entre tanto vocabulario de moda, hay términos que aplicados periodísticamente pueden añadir valor al trabajo informativo y a su relación con la audiencia. Es el caso del ‘tagging’.

‘Tag’ significa etiqueta en inglés, algo que sirve para catalogar, marcar. El ‘tagging’ online consiste en marcar aquellas páginas o contenidos de interés con palabras clave. El vocablo se ha hecho especialmente popular a raíz del éxito de proyectos basados en este sistema, como Delicious (http://del.icio.us), un marcador de favoritos compartido.

Servicios colaborativos

En Delicious, un usuario guarda los enlaces a las páginas que le interesan bajo las categorías que él mismo escribe. A la vez puede consultar las referencias del resto de personas que han catalogado páginas web en Delicious con las mismas palabras clave, por lo que el resultado es lo más interesante según un gran número de internautas. El rápido crecimiento de un servicio basado en una idea tan sencilla como útil atrajo el interés de Yahoo!, que lo adquirió hace unos meses, como comenté en una columna anterior.

Actualmente son muchas las iniciativas online inspiradas en el ‘tagging’. Algunos son servicios similares a Delicious con o sin funcionalidades añadidas, como Shadows, Furl o Connotea. Otros, como Flickr, utilizan el ‘tagging’ para fotografías. Otros están específicamente dirigidos a un uso concreto, como Cite you like, destinado a la comunidad científica. En Cite you like se guarda la información de bibliografía y artículos útiles para la investigación en un formato que después puede exportarse para referencias académicas.

También para artículos y noticias

El criterio colectivo de los usuarios de estos servicios es el que sirve de filtro para destacar lo más relevante. Esta idea es la que está detrás de proyectos como Digg o Menéame, pero esta vez lo seleccionado son artículos, a modo de medios informativos de edición socializada.

Un paso más allá es la propuesta de Common Times, con un diseño de portada más inspirado en el de la prensa tradicional en Internet, con similar sistema de destacados de noticias. Common Times está, además, sincronizado con Delicious, de manera que un usuario de Delicious “envía” su selección a Common Times mientras utiliza este sistema de favoritos de manera habitual. También funciona inversamente, seleccionando noticias para Common Times se pueden guardar en la cuenta de Delicious.

Archivo vivo

¿Cómo puede ayudar el ‘tagging’ a los periodistas o al periodismo que se practica en Internet? Para los periodistas que lo descubren es un gran aliado. Cualquier que sea el servicio que utilicen, se convierte en fuente de recursos y archivo personal fácil de transportar y consultar.

Pero lo interesante no es cómo ayuda a los periodistas, puesto que lo hace tanto como a cualquier otro ciudadano, sino cómo puede utilizarse para mejorar el resultado final de su trabajo. Y una respuesta es utilizarlo para transparentar las fuentes. Si durante la documentación e investigación sobre un tema, se van catalogando fuentes consultadas y referencias de interés online, esa selección se puede publicar junto con el texto o trabajo audiovisual una vez finalizado.

Investigación transparente

Eso se podría hacer, por supuesto, sin necesidad de utilizar palabras clave y favoritos compartidos. Pero supone dos diferencias, la primera, que requiere menos tiempo puesto que la selección se hace a la vez que la investigación, por lo que no incrementa el trabajo de redacción o producción periodística. La segunda y más importante, que al estar disponible bajo una categoría, cada vez que se añade una nueva web, página, artículo o recurso, se actualiza.

Si, por ejemplo, en la elaboración de este artículo he buscado fuentes o he recurrido a mi archivo en Delicious sobre tagging, y ahora publico el enlace a las palabras claves de mi cuenta, los lectores encontrarán hoy unas referencias, pero si vuelven dentro de un tiempo hallarán nuevos enlaces. La selección se convierte en una muestra de documentación que no caduca con la publicación del artículo, como suele ocurrir si se incorporan enlaces. Siempre que yo no la abandone, claro.

Ejemplos periodísticos

Algunos medios ya lo han puesto en práctica, como InfoWorld o la revista Nature, donde utilizan Connotea como herramienta de favoritos en Internet. Han comprobado que la colección de enlaces sobre algunos temas, como el de la gripe aviar, continúa siendo consultada por muchos lectores tiempo después de la publicación del reportaje que propició la creación del archivo online.

Pero además, en Nature también se han dado cuenta de que ciertas palabras clave como “bioinformática” o “acceso abierto” atraen un grupo regular de usuarios, por lo que se convierten en un agregador de intereses de lectores que también contribuyen catalogando favoritos con las mismas etiquetas. De esta manera, aportan su grano de arena documental.

Por lo tanto, puede servir para rastrear intereses temáticos de los lectores de una manera muy segmentada. No es en ningún caso un sustituto de las estadísticas de visitas pero puede ser una herramienta más del kit de los medios.

El uso social del ‘tagging’ parece una interesante herramienta para practicar un periodismo más transparente y colaborativo en Internet, puesto que está en consonancia con las demandas de los ciudadanos actuales, de sus conocimientos de Internet y de su interés por ser también parte implicada en el proceso informativo.