La Garlopa Diaria

9 enero 2012

Aquí seguimos

Este blog se creó en abril de 2005, cuando permanecía de baja tras una dura enfermedad. Aquello derivó en una adicción: contar lo que uno quiere, cuando uno quiere, sin límite de espacio, sin más fronteras que el respeto a todas las opiniones y las buenas maneras. Han pasado siete años. Aquí seguimos. La Garlopa se mudó a ELDECANO.es en julio de 2010. Allí ha estado alojada hasta el pasado mes de diciembre, fecha en la que tristemente desaparació esta cabecera. A su dirección y a los compañeros les estoy eternamente agradecido: fue bonito mientras duró.  

Confieso que ahora me han entrado dudas sobre si merecía la pena mantener o no un blog personal. No por desgaste, sino por falta de tiempo. Trabajo en El Mundo/Expansión y cualquiera que haya estado empleado en una redacción conoce la tiranía de los horarios en un diario. No es excusa. Seguiremos dando la murga con el blog porque al final uno busca siempre refugios seguros y al alcance de la mano. Merece la pena seguir atizando la conciencia.  

Un blog no es un medio de comunicación al uso, pero facilita el acto de comunicar. Quizá no tanto noticias como sí impresiones que ayudan a conformarnos una idea de la realidad que nos rodea. Los efectos de la crisis económica y del propio oficio están laminando buena parte de los medios de este país. La prensa cada vez está más castrada, sumida en una ola de cierres, expedientes de regulación, recortes de plantilla y ajustes severos. Más de cinco mil periodistas se han ido a la calle en España desde que estalló la crisis. La sangría continúa. El paro que no cesa está machacando con especial dureza una profesión que resulta impresindible para mantener con garantías el tinglado de la libertad. El poder respira aliviado cada vez que se cierra un periódico. La democracia supura. Quizá por eso en estos momentos cobran más importancia aquellas herramientas (especialmente en internet) que permiten dar cauce a la libertad de expresión. Por eso este blog permanecerá abierto. Porque escribir sigue siendo sinónimo de vivir. Porque expresar ideas siempre enriquece. Y, sobre todo, porque me divierte escribir sin ataduras. Libre. Sincero. Humilde.

Siete años después, aquí seguimos.

1 comentario

  1. Antonio Herrera dice:

    Suscribo en todo lo que dices, Raul. Un aplauso por tu decisión de seguir escribiendo, de mantener un blog, de sentarte día sí día no, a contarnos lo que piensas, lo que pasa, lo que podríamos cambiar entre todos, o uno a uno. Escribir es la última libertad que nos cabe. Y decirlo desde abajo, desde nuestra postura personal, desde la «Sociedad civil». Los periódicos, -TODOS- están mediatizados por la política o los intereses de grandes empresas. Los blogs, como el tuyo, como los que hacemos blogs por pura decisión personal, es el único aire puro que queda. Adelante pues.

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